Delineando estrategias
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¿Qué elementos afectarán los costos y precios en la nueva realidad?

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Publicado por José Alberto Mejía

septiembre, 2020

Puntos Destacados:


  • La pandemia de COVID-19 ha generado cambios globales en muchos ámbitos. Esto ha provocado que los negocios se estén concentrando en diversas situaciones inéditas
  • ¿Cuáles son los tres elementos que podrían afectar los precios?
  • En las empresas entre partes no relacionadas, los clientes podrían no estar dispuestos a pagar a sus proveedores los costos no productivos, en forma total o parcial

La contingencia generada por COVID-19 ha generado cambios globales en muchos ámbitos. Por ahora, los negocios se han concentrado en diversas situaciones inéditas, por ejemplo, atender una demanda inusual y desbordada; cerrar sus instalaciones temporalmente; el confinamiento de su fuerza laboral; implementar el trabajo a distancia; planear nuevas medidas y protocolos para regresar a operar de forma paulatina, entre otras.

 

Consulte la publicación Rumbo a la recuperación tras COVID-19

 

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Para las organizaciones que hayan cerrado sus instalaciones temporalmente y detenido su producción total o parcialmente, como la industria maquiladora de exportación, manufactureras bajo contrato, centros de servicios compartidos, representaciones mercantiles, entre otras, será complejo determinar los cambios razonables en los precios de los bienes y productos, en comparación con los previos a la contingencia.

 

Algunos elementos que podrían afectar los precios son:

 

1. Costos no productivos

 

Varios nexos de negocios entre partes relacionadas con residentes en México o en el extranjero han adoptado el cálculo de las contraprestaciones con base en la totalidad de los costos y gastos de operación, agregando algún margen de utilidad. Esta metodología generalmente se aplica en economías sólidas y en empresas que tienen prácticamente asegurada la recuperación de la totalidad de sus costos y la generación de utilidad, contexto en que se considera razonable.

 

Sin embargo, la pandemia ha creado la necesidad de incurrir en costos que no son productivos. Con ello, la metodología de facturar la totalidad de los costos más un margen de utilidad podría no corresponder a estos tiempos. Probablemente, en el mercado entre partes independientes, es decir, que tienen operaciones con empresas que no forman parte de su conglomerado, los clientes no estén dispuestos a pagar a sus proveedores los costos no productivos, y se enfoquen en minimizar los pagos propios y esforzarse en reestablecer sus operaciones y finanzas, por ejemplo, en los siguientes gastos:

 

  • Pagos a personal no productivo: se refiere a los pagos realizados a la plantilla que se ha quedado en casa y no tiene posibilidades de producir o prestar servicios. Identificar estos costos requerirá analizar cada puesto y separar los que son productivos y los que no lo son, total o parcialmente. Por ejemplo, la fuerza laboral de oficina que puede realizar actividades a distancia con conexión y equipos de cómputo apropiados es productiva, por otro lado, los no productivos son los operarios de la maquinaria en las fábricas, quienes desde casa no pueden realizar actividad alguna
  • Propiedad, planta y equipo no productivo (PPyE): en el caso de negocios que han cerrado sus instalaciones y cesado total o parcialmente la producción de bienes o servicios, los costos incluyen el uso de edificaciones, maquinaria y equipo de producción, servicios públicos, y todo el equipamiento de las instalaciones industriales, administrativas y otros conceptos. Al igual que los pagos al personal, algunos costos de PPyE pudieran no estar siendo aprovechados en actividades productivas, como consecuencia de la pandemia
  • Inventarios no productivos: estos costos estarán representados por inventarios que no podrán desplazarse y venderse al mercado por volverse obsoletos después de la contingencia. Por ejemplo, materias primas y productos no terminados que se hayan quedado en las líneas de producción, y no puedan convertirse en artículos terminados, así como inventarios de materias primas sin uso por cancelaciones o disminuciones de pedidos, o por la necesidad del negocio de cambiar la fabricación de productos

2. Precio y contraprestación pactada, recuperación de los costos y márgenes de utilidad

 

El cese de actividades no esenciales y otros factores impulsarán el ajuste de los acuerdos de negocios y las contraprestaciones pactadas; es poco probable que los precios se mantengan sin afectación tras los efectos de la COVID-19.

 

En las empresas entre partes no relacionadas, los clientes podrían no estar dispuestos a pagar a sus proveedores los costos no productivos, en forma total o parcial. Esta situación de negocios podría afectar las contraprestaciones entre partes relacionadas, ya sea nacionales o extranjeras.

 

Una alternativa que podría presentarse, dependiendo de cada caso, sería determinar las contraprestaciones sobre las siguientes bases:

 

  • La totalidad de los costos, más un margen de utilidad, según lo acostumbrado
  • Eliminar o disminuir el margen de utilidad, recuperando la totalidad de costos no productivos ocurridos durante el periodo de la contingencia
  • Excluir total o parcialmente la facturación de costos no productivos
  • Una combinación de alternativas

3. Reconocimiento de la afectación en los ingresos para unos y costos para los otros

 

Seguramente entre partes no relacionadas, los ajustes a los precios han sucedido de forma natural conforme lo han requerido las condiciones de los negocios; no necesariamente podría ser así entre partes relacionadas. Por ejemplo, en la compraventa de bienes o de prestación de servicios, ante la falta de bienes que comercializar o de servicios a prestar, los clientes no realizan consumo ni pago alguno, así como la remuneración a su proveedor.

 

En caso de seguir con la dinámica ordinaria de facturar por un lado y pagar por el otro, sin un debido reconocimiento de los efectos generados por la pandemia, las organizaciones podrían sobrevalorar sus ingresos o costos; por otro lado, sus clientes que son partes relacionadas estarán sobrevalorando la contrapartida.

 

Las empresas que producen bienes o prestan servicios que afecten los precios de sus operaciones con partes relacionadas por los costos no productivos en que incurran, podrían disminuir sensiblemente los márgenes de utilidad a los que están acostumbrados e incluso incurrir en pérdidas. Estas situaciones podrían generar consecuencias en el impuesto sobre la renta (ISR) en 2020, comparado con los presupuestos aprobados vigentes.

 

Esto ameritará un análisis fiscal y medidas inmediatas durante la pandemia, ya que los efectos siguen progresando cada día.

 

Es de alta relevancia evaluar de manera oportuna las diversas áreas, así como los efectos económicos y fiscales que se han mencionado, involucrando a los especialistas en materia contable, fiscal, precios de transferencia, contractual, legal, entre otros.

 

Opine: ¿qué acciones se pueden implementar para mitigar las afectaciones a los costos y precios?

Temas: Estructura Financiera, Fiscal y Legal

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