¿Qué se puede prever sobre los posibles efectos de la Reforma Fiscal de Estados Unidos en la operación de las empresas maquiladoras mexicanas?
Al inicio del proceso existía cierta incertidumbre en torno a los efectos que podrían tener temas como el impuesto fronterizo (BAT, por sus siglas en inglés), provocando un cuestionamiento sobre si los pagos que los clientes de las empresas maquiladoras hicieran a las mismas serían deducibles o no para efectos fiscales, o la repatriación de utilidades hacia los Estados Unidos, que preveía una posible salida de capitales.
Sin embargo, el BAT no fue aprobado, aunque en su lugar se aprobó un impuesto con una intención similar, conocido como base erosion anti-Abuse tax (BEAT, por sus siglas en inglés). Para la legislación estadounidense, el principal objetivo de este impuesto es limitar la deducción de los pagos que efectúen las empresas de Estados Unidos que erosionen la base gravable en dicho país. No obstante, dentro de los pagos que se efectúen no se consideran aquellos que formen parte del costo de ventas de las empresas en Estados Unidos.
El diferencial de tasa de impuesto corporativo representa el único tema que sí genera un efecto negativo. A partir de 2018, la tasa corporativa en Estados Unidos es de 21% y en México es de 30%. Este diferencial de tasas podría generar los siguientes efectos:
1. Imposibilidad de acreditar al 100% el impuesto sobre la renta (ISR) pagado en México por las siguientes razones:
- El ISR pagado en México a la tasa de 30%, aunado al posible impuesto sobre dividendos, será superior al impuesto que se tenga que pagar en Estados Unidos a la tasa de 21%, y los dividendos que reciban las empresas en Estados Unidos ya no están gravados para efectos del ISR en dicho país
- Los ingresos generados por las empresas maquiladoras representan, a la vez, una deducción para sus clientes en el extranjero, por lo cual, en cierta medida, se elimina una doble tributación; sin embargo, al gravarse los ingresos en México con 30%, y únicamente poderse tomar la deducción en Estados Unidos a una tasa de 21%, se genera un problema de doble tributación sobre el diferencial de tasas
La Reforma Fiscal de Estados Unidos no generó, sin embargo, tantos efectos negativos en las empresas maquiladoras en México, aunque sí se puede observar que nuestro país tendrá cierta presión para buscar una tasa corporativa más eficiente.
Las empresas deben evaluar nuevamente cuál es la opción de precios de transferencia que les permita optimizar sus márgenes de utilidad en México para efecto de mantener márgenes cercanos al valor de mercado de sus servicios, y reducir al máximo el efecto negativo de falta de acreditamiento del impuesto pagado en México.
Es importante destacar que, a pesar de este posible efecto, en el entorno actual de las empresas manufactureras seguirá siendo más eficiente y competitivo llevar a cabo las operaciones de maquila en México que regresarlas a Estados Unidos, siempre y cuando se mantenga un nivel de costos competitivos, sobre todo, de mano obra.
