Delineando Estrategias

Gestión de riesgos cambiarios ante la incertidumbre global

Escrito por Arturo Carvajal | 11/09/2025 03:16:18 PM

La reciente intensificación de los aranceles por parte de Estados Unidos (EE.UU.) ha ejercido una presión significativa sobre la dinámica del comercio mundial, afectando a sus socios comerciales.

Descarga la publicación: Gestión de riesgos cambiarios. Instrumentos naturales contra la volatilidad de las divisas

En este contexto, la reconfiguración de los flujos comerciales y la decisión estratégica de evitar ciertos mercados con mercancías sujetas a tarifas están afectando las rutas de navegación y el uso de puertos que ya estaban establecidos, lo que obliga a las empresas a adaptarse rápidamente a un panorama cambiante, generando un incremento en los costos de bienes y servicios.

En este contexto, aunque las empresas en Centroamérica deben llevar sus registros contables conforme a la moneda oficial establecida por las normativas fiscales de cada país, muchas adoptan las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), que permiten definir una moneda funcional distinta a la local para reflejar con mayor precisión el entorno económico en el que operan.

Asimismo, pueden presentar sus estados financieros en una moneda de reporte diferente, lo cual resulta útil para fines de consolidación, análisis financiero internacional o comunicación con inversionistas, flexibilidad que es especialmente relevante para entidades con operaciones transfronterizas o que realizan la mayoría de sus transacciones en monedas extranjeras, como el dólar estadounidense (USD).

En Centroamérica, las organizaciones que adoptan las NIIF, particularmente la NIIF 9, pueden aplicar la contabilidad de coberturas para reflejar sus estrategias de gestión de riesgos de manera transparente y alinearlas con sus operaciones, lo que permite cumplir con estándares contables reconocidos internacionalmente y fortalece la confianza de los grupos de interés.

Sin duda, la creciente inestabilidad geopolítica está reconfigurando las cadenas de suministro globales, impulsando a las compañías a priorizar la resiliencia mediante estrategias de relocalización (reshoring) y proximidad (nearshoring), pero también la cobertura con instrumentos naturales.

Para las empresas en Centroamérica, este entorno representa una oportunidad estratégica para posicionarse como actores clave en las nuevas dinámicas comerciales, lo que requerirá inversiones en infraestructura, ajustes operativos y una visión adaptativa que responda con agilidad a las tendencias emergentes del comercio global.

Opine: ¿Cómo pueden las empresas aprovechar las coberturas cambiarias naturales para proteger sus resultados financieros?